LA ASOCIACIÓN / HISTORIA DE LA AVV

Historia de la Asociación de Vecinos y Vecinas "San Pedro" de Andés

Las primeras asociaciones

Los trabajos del movimiento vecinal pronto se quedan en el olvido y no aparecen reflejados en la historia de los pueblos. No se encuentran entre aquellos acontecimientos considerados importantes por los encargados de escribir la evolución histórica de los pueblos, villas y ciudades. Sin embargo puede decirse que el movimiento vecinal fue un elemento básico que contribuyó a la organización y al cambio social de los pueblos y fue un punto de arranque de logros y mejoras sociales importantes.

Las asociaciones vecinales no intentan sólo dar soluciones a los muchas carencias existentes, sino que, ante todo, favorecen el encuentro y el trabajo solidario. El pueblo, la villa, la ciudad, se convierten en un núcleo organizado, activo, en el que, junto a la movilización por un determinado problema, las asociaciones abordan todos los asuntos de la vida diaria, desde la vivienda, la educación, la sanidad, el estado de las comunicaciones, los abastecimientos de aguas, etc. hasta la organización de las fiestas patronales y populares.

Las asociaciones de vecinos y vecinas empiezan su andadura entre los años 60 y 70 en los barrios de los alrededores de algunas grandes ciudades, en un momento en el que el objetivo de lograr mejorar las condiciones de vida de los pueblos y ciudades no se podía conseguir si antes no se alcanzaban las libertades democráticas.

En el concejo de Navia surgen entre los años 1977 y 1979. Las asociaciones vecinales de Andés, Anleo, Navia, Puerto de Vega, Vigo, Villapedre y un poco después Cabanella, nacen por causa de un problema concreto en cada lugar. Tienen como punto de arranque las reivindicaciones populares que tienen que ser llevadas por una organización que movilice a la gente ante las administraciones públicas en un momento en el que los pueblos estaban totalmente abandonados, sin saneamientos ni traídas de agua, sin recogida de basura, sin suficiente potencia eléctrica, con los caminos en mal estado y ya no digamos como estaba la situación sanitaria y cultural, mejor no acordarse.

Esta movilización vecinal no fue obra de un grupo aislado de gente, sinó que contó con la simpatía y el apoyo de la mayoría de los sectores sociales y muchos profesionales colaboraron activamente en el asesoramiento y en la realización de los proyectos vecinales. Se hicieron experiencias muy interesantes de participación de los vecinos y vecinas al tratar los temas de una manera democrática, aportando soluciones y comprobando la viabilidad de los esfuerzos realizados por el conjunto del vecindario. Fue un movimiento sin tradición cultural que estableció una comunicación fluida con los partidos políticos, sindicatos y medios de comunicación. Se organizaron internamente haciendo vocalías, comisiones, reuniéndose con la gente, publicando boletines informativos, organizando actividades culturales, recuperando las costumbres y tradiciones y también la lengua de esta zona.

En un momento en que los ayuntamientos estaban en bancarrota fue necesario rehabilitar escuelas, acondicionar parques y jardines, limpiar playas y caminos... Estas tareas movilizaron a muchos vecinos y vecinas que tuvieron la oportunidad de aportar su colaboración y convertirse en voluntariado social sin esperar más recompensa que el trabajo bien hecho y la solidaridad con sus vecinos y vecinas. En fin, se llegó a un modelo participativo que no se limitaba sólo a la reivindicación sino que se asume que la solución de los problemas es tarea de todos.

En 1979 se constituyen los primeros ayuntamientos democráticos. El movimiento vecinal participa en las elecciones. Los resultados no son los esperados, pero con un representante en la corporación municipal las cosas empiezan a cambiar.

Por otra parte, también se empieza a superar el localismo y el aislamiento. Se llega a la conclusión de que los problemas son comunes a todas las asociaciones y que es necesario afrontarlos colectivamente. En estos momentos es necesario destacar el trabajo conjunto realizado por las asociaciones vecinales, asociaciones de padres, sindicatos y partidos políticos con el objetivo de conseguir unas instalaciones sanitarias dignas. Muchas reuniones en Serantes, en Navia, en Oviedo..., con responsables de Sanidad, consejeros, alcaldes, Consejo Regional de Asturias, ministros, etc. Recogida de firmas, presiones de todo tipo, elaboración de informes, documentos, mapas... un trabajo y un esfuerzo considerable de todas las entidades.

En 1983 se celebraron las segundas elecciones municipales. Las personas más destacadas por su trabajo en el movimiento vecinal pasan a formar parte de la nueva corporación, pero ahora encabezando las candidaturas de los partidos políticos que asumen parte de las reivindicaciones vecinales.

Las asociaciones de vecinos y vecinas pasan por su peor momento. Unas desaparecen y las que logran sobrevivir tardarán bastante tiempo en recuperarse. Pero, ya son otros tiempos.

Nuestra Asociación: 46 años trabajando por Andés

El 29 de septiembre de 1978, el Gobierno Civil de Oviedo aprobaba los Estatutos de la Asociación de Vecinos y Vecinas "San Pedro" de la parroquia de Andés, pionera en el movimiento ciudadano en el Occidente de Asturias y artífice, junto con otros grupos y asociaciones, de las conquistas sociales que a lo largo de estos años se fueron sucediendo en nuestro entorno más próximo. En esta fecha, culmina un proceso que se venía gestando desde hacía algunos años, cuando un grupo de jóvenes de Andés comenzó a reunirse en los alrededores del "Campo San Pedro" para hablar sobre los problemas que tenía planteados el pueblo de Andés y el Occidente Astur en general. Los debates se intensificaban en el verano y en los períodos vacacionales con la llegada de los jóvenes que estaban estudiando o trabajando en otros lugares como Oviedo, Madrid, Santiago, País Vasco, etc. que eran portadores de ideas y experiencias que se estaban llevando a cabo en las ciudades o pueblos donde vivían temporalmente. Todos eran conscientes del estado de abandono en que se encontraba el pueblo de Andés y pensaban que era necesario hacer algo para cambiar esta situación. También estaban seguros que si ellos no lo hacían nadie vendría a hacerlo, por lo que había que dar un paso más y tratar de implicar en estas reuniones al mayor número posible de personas, no sólo jóvenes, sino también vecinos y vecinas de más edad. Quién no recuerda los caminos intransitables durante gran parte del año debido al barro y al agua, las bombillas que apenas alumbraban por falta de potencia, el "Campo San Pedro" convertido en una laguna, el cementerio lleno de toxos, los problemas por falta de agua, las Escuelas de Téifaros convertidas en un montón de escombros, la deficiente atención sanitaria por falta de medios, la nula actividad cultural, etc.

En noviembre de 1977, cuando se recuperan las libertades, se convoca la primera asamblea de vecinos y vecinas con una asistencia masiva, superando totalmente nuestras previsiones y quedándose muy pequeñas las aulas de las escuelas. Pero mayor fue la sorpresa al ver el entusiasmo con que el vecindario participaba en los debates aportando ideas con el propósito de encontrar solución a los problemas planteados. Como fruto de ésta y sucesivas asambleas, surge la voluntad colectiva de asociarse mediante la constitución de una asociación vecinal.

El veintiuno de marzo de 1978 queda constituida la Comisión Gestora que preside Severo García, y que será la encargada de la elaboración de los Estatutos. La Asamblea General convocada por la Comisión Gestora el ocho de abril de 1978 aprueba los Estatutos y acuerda enviarlos al Gobierno Civil de Oviedo para su legalización. El veintinueve de octubre tienen lugar las elecciones para designar a los componentes de la primera Junta Directiva de la Asociación. A partir de este momento empieza una intensa actividad que abarca gran cantidad de campos, por lo que el trabajo de las comisiones de sanidad, cultura, obras, deporte, educación y agricultura cobró especial importancia. Desde las primeras reuniones de la Comisión Gestora se vino reclamando la reparación de los caminos de toda la parroquia, para los cuales la Diputación Provincial había destinado 6.365.994 de las antiguas pesetas. El Ayuntamiento se negaba a realizar la obra a pesar de las múltiples reuniones mantenidas, así que se convocó una manifestación para el tres de febrero de mil novecientos setenta y nueve, que partiendo de Andés recorrería diversas calles de Navia para terminar delante del Ayuntamiento. La manifestación no llegó a celebrarse ya que el Gobierno Civil de Oviedo no la autorizó; las obras habían comenzado dos días antes. Como se ve, la organización y unión de los vecinos y vecinas empezaba a dar los primeros frutos. Los jóvenes, desde un primer momento, comenzaron a acondicionar el local de la Asociación situado en el edificio anexo a la Iglesia. Para equiparlo, se hacen mesas, sillas, armarios y estanterías aprovechando el material de las escuelas de Téifaros. El local que constaba de una sala de reuniones y otra de televisión y juegos, se convierte en el centro de reunión de los jóvenes de Andés de donde saldrán gran cantidad de iniciativas de tipo cultural que dinamizarán la vida del pueblo. Destacamos charlas sobre temas de actualidad, campeonatos de ajedrez, campeonato de futbito por barrios, festival de Navidad, recuperación del camino de Oneta y sobre todo la formación de un grupo de teatro que representa con gran éxito varias obras en los pueblos de los alrededores.

Festival de Navidad - Enero 1983
Festival de Navidad - Enero 2000 - Participantes en el Belén Viviente

Es importante destacar la labor desarrollada por la juventud en todos los aspectos y la relación de intercambio de experiencias y actividades que mantuvo con otros grupos de jóvenes de diferentes localidades, especialmente con la Asociación Juvenil de Parlero. Este local también fue el lugar de reunión y de celebración de actividades para otros grupos y asociaciones, no sólo del concejo de Navia, sino de la comarca.

Grupo de Teatro de la Asociacion, representando una obra en Parlero (1979)

En el tema sanitario la labor fue importante. No podía ser menos dada la carencia total de instalaciones de este tipo. Junto con otros grupos y asociaciones se formó parte de la Comisión Sanitaria de Occidente que se constituyó en Serantes (Tapia) el cuatro de marzo de mil novecientos setenta y nueve y que sin duda fue donde se puso "la primera piedra" de lo que hoy es el Hospital Comarcal de Jarrio. Esta comisión se marcó como objetivos:

  • Reivindicar equipamiento sanitario para el Occidente de Asturias.
  • Participar en la elaboración del mapa sanitario de Asturias.
  • Elaborar un documento que demostrara que la ubicación idónea del futuro hospital comarcal era Jarrio.

Las actividades realizadas fueron variadas, pasando por reuniones con autoridades sanitarias, el envío de telegramas y escritos reclamando instalaciones sanitarias dignas y la recogida de firmas. También se trabajó con la Asociación Vecinal "La Barca" de Navia en la reivindicación de un centro de salud para el concejo.

Cartel solicitando un Centro de Salud en Navia

En educación se colaboró con otras entidades del concejo para reclamar un instituto donde la enseñanza media fuera gratuita. Se participó en reuniones con los responsables en la materia, destacando las celebradas con el Consejero Provincial de Educación y representantes de las Asociaciones de Padres de Alumnos de Asturias para conocer las posibilidades que había de solución a corto plazo. En mil novecientos ochenta y dos se logró la apertura de la Escuela de Preescolar en Andés. Las de Téifaros y las del "Campo San Pedro" fueron cerradas en 1975 cuando entró en funcionamiento el Colegio Público Ramón de Campoamor de Navia. Fue necesario habilitar un local que reuniera las condiciones idóneas, de lo que se encargó la Asociación, en los bajos del edificio anexo a la Iglesia Parroquial. Al dejar de utilizarse, las Escuelas de Téifaros entraron en un proceso de deterioro progresivo que las llevó a convertirse en un montón de escombros. Se intentó por todos los medios que esto no ocurriera, limpiando la maleza que poco a poco las devoraba y reparando las goteras para evitar el hundimiento de los tejados; pero todo fue inútil, debido al escaso interés que mostraban los miembros del Patronato "Joaquín Rodríguez", exceptuando los familiares del benefactor, que siempre apoyaron hasta el final las reivindicaciones de nuestra Asociación.

El basurero de la Bragada fue otro de los caballos de batalla de la Asociación. La situación llegó a ser alarmante, por el deterioro alcanzado en la zona de su ubicación (ratas, basuras por todos sitios, humos, malos olores, etc.). Desde la Asociación nos pusimos en contacto con otras Asociaciones con problemas similares, con el fin de intercambiar información para ofrecer alternativas y soluciones. Ante el cariz que tomaban las protestas, llegando incluso a impedir el paso de los camiones cargados con la basura, el Ayuntamiento toma diversas medidas que mejoran la situación, pero el problema no queda zanjado hasta el año mil novecientos ochenta y nueve, cuando el vertedero es clausurado de forma definitiva.

En el aspecto deportivo, se ayudó al Andés Club de Fútbol ante las presiones a que fue sometido para que abandonara el uso de las instalaciones municipales del Campo del Pardo y se apoyaron sus propuestas para conseguir unas instalaciones deportivas que le permitieran desarrollar su proyecto social y deportivo.

En mil novecientos ochenta y tres se asume la responsabilidad de organizar las Fiestas Patronales. Empresa un tanto complicada, dado el gran nivel que se alcanzó con la comisión saliente. En los años sucesivos se les dio un aire más popular y participativo con la introducción en el programa festivo de actos como el Pregón, la recuperación de la Procesión al Calvario, el Rincón Popular, las Jornadas Culturales y la elaboración de un libro dónde se recogen acontecimientos históricos y lo sucedido en el pueblo durante el año, que le dan más realce y marcan la diferencia con las restantes fiestas de la zona.

Conferencia del Doctor Angel Gómez (Jornadas Culturales 1996)

Entre 1987 y 1993 fueron presidentes José Menéndez y Félix Fernández, período en el que se mantuvo una línea de actuación similar a la anterior, y en el que se consolidaron los proyectos sobre los que se venía trabajando. Una vez conseguidas unas infraestructuras básicas, ahora se trataba de conservarlas con el fin de poder disfrutar de ellas en buen estado el mayor tiempo posible.

Por fin, en mil novecientos ochenta y siete, el Ayuntamiento nos cedió las Escuelas del "Campo San Pedro" para utilizarlas como local social. Fueron acondicionadas por los vecinos y vecinas, consiguiendo unos locales amplios y cómodos para la realización de todo tipo de actividades. Con la participación vecinal y la colaboración de diversos profesionales, se realizaron importantes mejoras tanto en el Cementerio como en el "Campo San Pedro", a lo que hay que añadir la plantación de las magnolias que hoy embellecen este lugar tan importante para la parroquia.

Mantener los espacios públicos en perfecto estado de limpieza fue otro de nuestros logros. Las deficiencias en el abastecimiento de agua, las normas urbanísticas municipales y la consecución de que todo el pueblo tuviera el camino asfaltado hasta sus casas, fueron las demandas a las que hubo que hacer frente, canalizándolas a las instituciones con infinidad de escritos, informes, reuniones e incluso movilizaciones.

Plantación de árboles en el campo San Pedro (Año 1988)

En mil novecientos noventa y uno se formó junto con el resto de asociaciones vecinales, la Federación de Asociaciones de Vecinos del Concejo de Navia y nos integramos en la Confederación de Asociaciones Vecinales del Estado Español (CAVE). Era necesario modificar las formas de actuación y adaptarse a la cambiante realidad social. Día a día surgen nuevos temas y es necesario incrementar la capacidad de respuesta.

Ángel González, en la confederación de Asociaciones Vecinales de Asturias

Rámon García López, que formó parte de todas las juntas directivas anteriores, asume la Presidencia de la Asociación en 1993. Se rodea de un amplio equipo de colaboradores, en el que se conjuga la experiencia y la juventud, para iniciar nuevos proyectos que lleven a aumentar la calidad de vida de los vecinos y vecinas de Andés. Se elabora un Plan de Mejoras para la Parroquia, documento en el que se propone un plan de desarrollo global, centrado en las infraestructuras básicas, los servicios comunitarios y una serie de propuestas para un desarrollo respetuoso con el medioambiente, que preserve la cultura y formas tradicionales, que nos ayuden a no olvidar lo que fue y es hoy la parroquia, en un momento en el que está sufriendo una profunda transformación motivada por el alarmante descenso de la natalidad, la disminución y el envejecimiento de la población y el cese anticipado de la actividad agricola-ganadera por parte de la mayoría de los ganaderos. Junto con las denuncias, las reivindicaciones, siempre acompañadas de las alternativas correspondientes y la importante labor cultural desarrollada, la Asociaciación sirvió para representar a nuestro pueblo en gran cantidad de actos, homenajes, reuniones, etc.

Homenaje a los expresidentes (Año 1998: XX Aniversario de la Asociación)

En octubre de mil novecientos noventa y cuatro, como representantes de la Federación de Asociaciones Vecinales del Concejo de Navia, estuvimos presentes en una recepción ofrecida por Don Felipe González, Presidente del Gobierno, en Madrid, con motivo de celebrarse el veinticinco aniversario de la fundación de las primeras asociaciones vecinales.

En mil novecientos noventa y cinco representamos al pueblo de Andés, en los actos celebrados en Puerto de Vega con motivo de la entrega por parte de S.A.R. el Príncipe de Asturias del premio al Pueblo Ejemplar.

Otro de nuestros objetivos, a lo largo de todos estos años, fue el de dar a conocer el nombre de nuestro pueblo en todos los lugares en que fuera posible y que los visitantes se encontraran a gusto tanto por el paisaje como por el trato de los vecinos y vecinas. Pensando en esto colaboramos en la organización de diversas actividades, entre las que destacamos la Travesía Costa Naviega señalizando todos los lugares de nuestra parroquia por donde discurría.

La Asociación fue una entidad donde los objetores de conciencia podían realizar la prestación social sustitutoria, así entre 1995 y 2001 más de una decena de jóvenes realizaron un importante servicio a la comunidad: limpieza de caminos, playas y espacios públicos, conservación y mantenimiento de los locales de la Asociación, campo de fútbol, etc. y también actividades de tipo administrativo y cultural.

Debido a la demanda de un buen número de vecinos y vecinas, en el año 2000 se planteó un nuevo proyecto: la presentación de la candidatura al Premio Pueblo Ejemplar de Asturias. Después de un tiempo de reflexión se llegó a la conclusión de que no se daban las condiciones adecuadas, dado que era necesario hacer varias mejoras en el conjunto de la parroquia, entre éstas la mejora del lugar más representativo de la parroquia, el Campo San Pedro. La construcción de un parque era una vieja aspiración de los andesinos y andesinas, a la que el Ayuntamiento de Navia se negó en repetidas ocasiones. A partir de ese momento fue uno de los principales objetivos sobre los que trabajó la Junta Directiva, culminando en 2005 con la inauguración del nuevo Campo San Pedro.

Visita al Museo Etnográfico de Grandas de Salime (Jornadas Culturales 1997

Desde la Asociación se impulsó la presencia de los jóvenes en los órganos de dirección para hacerlos protagonistas de la resolución de sus problemas y necesidades. Se pusieron a su alcance los medios disponibles que les permitieran adquirir valores como la tolerancia, el respeto, la colaboración y estilos de vida sana. A lo largo de este tiempo también se pasó por momentos de crisis y de poca actividad motivados por el cansancio y el desánimo al ver que los problemas no se solucionaban y que se usaron todo tipo de medios para arriconar nuestra actividad, ya que las reivindicaciones y la capacidad de respuesta que el pueblo tiene ante cualquier problema resultaba y resulta molesto para las instituciones.

Desde hacía algún tiempo se venía reclamando un relevo para los miembros de la Junta Directiva que llevaban muchos años en la misma. Al finalizar en dos mil uno el segundo mandato de Ramón García, no se presenta ninguna candidatura a la presidencia de la Asociación, teniendo que hacerse cargo de la misma una Junta Gestora. Esto sirvió para que, a lo largo de casi un año, se entablara un amplio debate sobre la necesidad de mantener o no la Asociación.

Se considera que es imprescindible su continuidad y que es normal pasar por etapas de poca actividad, lo importante es que exista una estructura organizativa básica que con rapidez pueda dar respuesta a cualquier situación que surja en el pueblo. La Asociación de Vecinos y Vecinas debe mantener el espíritu reivindicativo junto con la actividad sociocultural y festiva. Sin ningún tipo de dudas, la capacidad de denuncia y reivindicación define lo que es una Asociación Vecinal. Sin esta práctica, elemento esencial que nos diferencia de otro tipo de asociaciones, difícilmente se llegaría a mejorar la calidad de vida de nuestro pueblo. Esta estructura organizativa no puede permanecer anclada en el pasado y tiene que asumir los valores emergentes en la sociedad actual: la defensa del medioambiente y del Estado de Bienestar, el desarrollo sostenible, la paz y la solidaridad entre los pueblos, el rechazo al racismo y la xenofobia, etc. La participación ciudadana en la toma de decisiones y la colaboración con las instituciones es otro de los elementos importantes del movimiento vecinal. La carencia de recursos para poder desarrollar acciones y conseguir los objetivos no debe llevarnos a perder nuestra independencia frente a las instituciones públicas.

Como fruto de este intenso debate, en el que se vieron implicados un buen número de personas, surgieron las nuevas Juntas Directivas, al frente de las cuales se colocó Matías Maximino García Fernández, dispuesto a continuar con esta singladura emprendida hace ya cuarenta y siete años. Actualmente Maximino García Fernández continúa siendo el presidente de nuestra Asociación.

Rincón Popular dedicado "A nuestros mayores" (Año 1992)